¿En qué situaciones es más conveniente retirarme de una negociación para comprar una casa?
Situaciones en las que debes retirarte de una negociación para comprar una vivienda
¿En qué situaciones puedo retirarme de una negociación para comprar una vivienda?
- Fallas y/o daños en la estructura de la vivienda
- Falta de financiación por alguna entidad financiera
- Problemas en la documentación
Fallas y/o daños en la estructura de la vivienda
Una de las principales razones para retirarse de una negociación para comprar una vivienda es cuando se realiza una inspección minuciosa de la propiedad y se descubren cosas negativas en ella. Por ejemplo, si los cimientos o las estructuras del bien inmueble se están cayendo o desmoronando, problemas relacionados con la humedad y el moho, mano de obra de mala calidad, e inclusive si hay una construcción en malas condiciones.
Se puede enfrentar esta situación de dos maneras: la primera es que el propietario se haga responsable de cubrir todos los gastos que surjan de las reparaciones, y la segunda es aceptar la vivienda en las condiciones en las que se encuentra, pero a un menor precio.
Sin embargo, muchas veces las reparaciones pueden exceder tu presupuesto, aún si el propietario decide realizar un descuento por las fallas o daños que tenga la vivienda. Por esta razón, es mejor retirarse de la negociación, sobre todo si no has dado algún anticipo o enganche de dicha propiedad.
Falta de financiación por alguna entidad financiera
Existen situaciones en las que decides solicitar un financiamiento ante una institución bancaria, pero durante el proceso, deciden retirarte los fondos o no otorgar el préstamo. Esto se debe a circunstancias que no están bajo tu control, algunas veces deciden hacerlo porque no cuentas con los ingresos suficientes para cubrir las mensualidades de una hipoteca, debido a la falta de empleo, e inclusive porque tienes un crédito automotriz vigente o porque debes pasarle pensión a tus hijos. Por otro lado, si eres un titular moroso y tienes un mal historial crediticio, entonces la entidad financiera decidirá no brindarte ningún crédito.
De esta manera, cualquier situación que irrumpe con el flujo de tus ingresos puede ser una razón para no otorgarte un financiamiento y, por lo consiguiente, la negociación para comprar una vivienda puede cancelarse porque no cuentas con los recursos suficientes para poder adquirirla.
Una buena alternativa para saber si eres candidato para contratar un crédito hipotecario, es utilizar las herramientas de precalificación, las cuales no te llevan más de 5 minutos y te ayudan a esclarecer cualquier duda que tengas sobre el financiamiento para comprar una casa.
Problemas en la documentación
Durante la negociación para comprar una vivienda también pueden surgir señales de alerta al finalizar con el proceso. Es decir, en el momento que se solicite la documentación para cerrar el trato.
Los casos más frecuentes de esta situación se presentan cuando el propietario no cuenta con las escrituras inscritas ante el Registro Público de la Propiedad o éstas no están a su nombre. Otro de los factores de alerta es si hay gravámenes (deudas o impuestos) pendientes o si existe un crédito hipotecario sin liquidar. Además, hay bienes inmuebles que tienen más de un heredero y en muchas ocasiones no todos los propietarios dan su autorización para la compraventa.
Es por ello, que si te enfrentas a cualquier situación anteriormente mencionada, es mejor que decidas retirarte de la negociación. Esto te ayudará a evitar problemas legales a largo plazo, ya que el Título de la Propiedad es indispensable para cerrar un trato de compraventa de una casa.