Emplea un fideicomiso para adquirir una casa
Usar un fideicomiso para comprar una casa requiere conocer cuáles son los alcances y modalidades de esta forma de transacción, así como asesoría y acompañamiento
Un fideicomiso es un contrato, en el que algunos bienes, posesiones o derechos son dispuestos por una persona en beneficio de un tercero y es ampliamente usado en el mundo financiero con múltiples propósitos.
Para poder formar un fideicomiso se necesita de tres personas físicas o morales:
- El fiduciante o fiduciario. Es la persona física o moral que prestará su nombre para realizar la compra del bien por instrucciones del interesado. Quien lleve este título se encargará de administrar o ceder los bienes cuando se cumplan las condiciones que estipula el contrato de fideicomiso. Es la parte que aportará cualquier tipo de bien y dará las condiciones para su entrega o utilización y, en el caso de los bienes raíces, quien será propietario temporal de ella.
- El fideicomisario. El que recibirá en beneficio los bienes que se consideran como fideicomitidos. Cuando la condición por la cual se dieron los bienes en fideicomiso es cumplida, estos pasan a ser propiedad del fideicomisario.
- El fideicomitente: es el vendedor del inmueble que anuncia la venta de la propiedad o aquel que posee los bienes en primer lugar.
Dentro de las diferentes modalidades, existen tres que te ayudarán en caso de que quieras comprar una casa por medio de un fideicomiso.
¿Cuáles son las modalidades de fideicomiso para comprar una casa?
- Testamentario
- Bancario
- De Bienes raíces o inmobiliario
Fideicomiso testamentario
Si cuentas con una cantidad de dinero que te fue heredada por medio de un fideicomiso, tienes la oportunidad de traspasarlo al pago de un crédito hipotecario. Esta modalidad suele solo ser aceptada por instituciones bancarias. Otra de sus características es que se requiere de que la figura del fiduciario funja como el intermediario entre ambas partes.
La manera en la que funciona es que, después de pedir un crédito hipotecario, el pago de este se supedita a las aportaciones mensuales del fideicomiso al beneficiario. Se requiere que tú o el fiduciario demuestren que el fideicomiso tiene los suficientes fondos para liquidar el crédito.
De lo contrario, es necesario demostrar que con los ingresos mensuales se podrá cubrir la cantidad que el fideicomiso no cubre, como en un crédito habitual. Esta modalidad de fideicomiso para comprar una casa es una de las más usadas y sencillas para adquirir un inmueble.
Fideicomiso bancario
En el caso de que seas extranjero y desees invertir en inmuebles que tienen alguna restricción, un fideicomiso para comprar una casa que te puede ayudar es el bancario. El proceso de compra dura, aproximadamente, un mes, pero se puede extender hasta por un año.
En esta transacción, el fideicomitente es el vendedor de la propiedad, ya sea una construcción o un terreno. El fiduciario será la institución financiera que compra el inmueble, por instrucciones del comprador extranjero. Aunque la vivienda se comprará con recursos del fideicomisario, el beneficiario del fideicomiso es quien legalmente compra la casa.
Esta es una manera de llegar a un acuerdo con las leyes que regulan la compra de bienes raíces por parte de los extranjeros, y respetando también la voluntad del comprador real. Aunque hay más maneras para que un extranjero compre una casa en México, el fideicomiso para comprar una casa a través de un banco es la más popular, pues no requiere de inversiones mayores, salvo algún pago de derechos.
Fideicomiso de bienes raíces o inmobiliario
El fideicomiso de bienes raíces es escogido como una de las formas más seguras de invertir en inmuebles, pues todo queda estipulado por un contrato que fija ciertas condiciones. Las tres partes tienen que estar en común acuerdo, por lo que la inversión en capital y en el inmueble siempre estará protegida.
La construcción de grandes obras o proyectos inmobiliarios es uno de los principales motivos por los que se emplea el fideicomiso de bienes raíces. En esta transacción, el fiduciante es quien dará el capital para la compra de un terreno e inmueble, y quien correrá con los gastos para la obra que se haya acordado.
El fiduciario es quien está a cargo de administrar el dinero con el que se pretende construir. Administrará la obra y, en algunas ocasiones, es quien también tendrá a su nombre el título de propiedad fiduciaria, pero temporalmente. Todo está sujeto a que se cumplan las condiciones que estableció la primera parte.
La tercera parte que interviene en un fideicomiso de bienes raíces es el beneficiario. El inmueble quedará en favor de esta persona física o moral, por lo que se entiende que su obligación es llevar a término la obra como fue estipulada por el fiduciante.
Hay ocasiones en las que el fiduciante y el beneficiario es la misma persona, pero puede actuar en favor de su empresa o emplear el fideicomiso de bienes raíces para administrar un capital inesperado. La base de este fideicomiso para comprar una casa o empezar una obra son las condiciones que se estipulen para tomar total posesión del inmueble.
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