¿Hay confianza para comprar vivienda? Te mostramos los datos del INEGI
La confianza del consumidor reporta una lectura económica sobre cuáles son las expectativas en el entorno global. A lo largo de la pandemia, este ha evolucionado cíclicamente, tanto positiva como negativamente, en cuanto a los bienes raíces.
En relación a la confianza para los planes de comprar casa, ha mostrado una racha al alza, de acuerdo con el último dato publicado por el INEGI.
Por lo que, actualmente, se observa un sentimiento optimista en la intención de adquirir una vivienda. Esta realidad también significa la necesidad de crear un perfil de ahorro para, efectivamente, materializar una nueva adquisición.
La confianza general ha caído 6.8 por ciento anualmente a noviembre del presente; aunque la orientación inmobiliaria se ha incrementado en el país. Es decir, hay una revisión de expectativas cada vez más positiva.
En particular, la confianza en los bienes raíces residenciales en México ha variado positivamente 4 por ciento durante el último trimestre (a noviembre de 2020), según la Encuesta Nacional sobre la Confianza del Consumidor, elaborada en conjunto por el INEGI y el Banco de México.
A este ritmo de apreciación, esperaríamos que a diciembre de 2021, este indicador complementario se ubique en un nivel de hasta 16.5 puntos. Con ello se potencian los planes de compraventa residencial en el corto plazo.
Las opciones inmobiliarias —comprar, remodelar o construir— han ganado un mayor peso entre las opciones de gasto en la canasta —básica y extendida— de los consumidores.
Si durante 2021 continúa consolidándose esta tendencia, también se observará un mejor posicionamiento de los bienes raíces. Por lo que los planes de hogares que opten por la adquisición de una vivienda, deben responder a un plan financiero o un plan de ahorro de mediano y largo plazo.
Aunque se espera una revisión a la baja de la confianza, sobre todo si se percibe una mayor incertidumbre o volatilidad de los indicadores macroeconómicos. Particularmente, en la tasa de interés, inflación o tipo de cambio entre el peso y el dólar.
Por lo que, una menor confianza significa una contracción en esta intención para los próximos dos años.
Aunque, por otra parte, una mayor confianza en los planes inmobiliarios representa un mayor impacto de las metas comerciales, de forma que:
- Se cuente con un mejor horizonte de planeación, diseñado por los jugadores de la industria inmobiliaria
- Haya una correlación más alta y precisa entre desarrolladores, banca hipotecaria, cámaras empresariales, alcaldías y municipios, asesores inmobiliarios y nuevos consumidores, etc.
- Se logre un mayor acoplamiento a los planes sectoriales, desarrollo de sus áreas de oportunidad y maximización de los beneficios de cada plaza
A pesar de esta realidad vemos que la confianza es aún un pilar central para incrementar la liquidez, con un tráfico de calidad a cada plaza. Esto ayuda a lograr un mejor balance entre la calidad de la oferta de vivienda y la solución residencial de los usuarios.
Así, la confianza en la industria inmobiliaria, es la base para crear un mejor entorno local. El cual se vincula rápidamente a la tendencia de su ciclo real durante 2021.